En el punto más álgido de la ciudad, pasan una tras otra lujosas camionetas, cuyos dueños, normalmente buscan algo refrescante, para apagar los efectos de la resaca. Ella, mezcla y tritura en el mortero unas hierbas que una vez transformadas en tereré, produce un efecto casi mágico.
Se llama Anuncia Romero, la segunda de 4 hermanos. Nació en Islerias, Distrito de Isla Umbú, y alli realizó su escuela primaria. A los 12 años se trasladó hasta la ciudad de Pilar en donde inició sus estudios secundarios, los que quedaron inconclusos a mitad de camino, a consecuencia del trabajo.
Anuncia traía ropas de Asunción que después comercializaba entre Pilar y el interior. Cuando ya no era rentable vender ropa, con su pareja, de profesión constructor, marchan a la Argentina, a la provincia de Córdoba. De alli van a Buenos Aires y vuelven al país luego de 7 años. Ya con un hijo y por las crisis sociales del vecino país, emprenden el regreso.